[PARTIDA] El altar de la Oscuridad [PARTIDA]

[Dukebot]

Bueno como se supone que ellos vienen cuerpo a cuerpo, cuando veo que ya estan a una distancia no muy lejos pero no muy cerca me hecho atras corriendo todo lo que puedo, vuelvo a tumbarme y diusparo disparos precisos como la ora vez.

[Karnizero]

*** 5 de Mayo del 2006, 1:15 ***

En la lejanía, la marabunta de humanoides rugía de furia y odio hacia los que estaban intentando descansar en el montículo.
Pronto se acorta la distancia entre ellos y nosotros, mientras las armas son recargadas y las granadas dispuestas.

Firemaster, haciendo siempre uso de su imaginación, cree que su Fusil de Repetición Gauss es una metralleta.
Éste, se pone a hacer una especie de trinchera con las pocas piedras que había por el suelo, así que los demás le gritais:

- Deja de hacer el idiota y vente para aquí... No podemos dejar que nos rodeen...

Pero FireMaster, entusiasmado con la matanza que se avecina, cree ver un fusil de francotirador en sus manos, cuando en realidad no es mas que un Fisul de Repetición Gauss.
Se tira al suelo, y empieza a disparar hacia la multitud, disparo a disparo.
Los disparos de FireMaster impactan en la multitud, haciendo que algunos de los deformes mueran en el acto, y que otros caigan al suelo o pierdan alguna extremidad. Los heridos pronto son aplastados por los que vienen detrás.

Mientras tanto, Godlik3 agarra una de sus granadas explosivas, y la lanza hacia el medio de la furiosa multitud.
La granada viaja por el aire, mientras los humanoides deformes, ajenos a su cercano destino, sigen caminando. La granada cae en medio de los deformados seres, y al momento explota, haciendo saltar por los aires una nube de cadáveres, sangre y vísceras por doquier. Al oír la fuerte explosión, la multitud parece revolucionarse, como si estuviesen confundidos, pero pronto continúan avanzando, mientras levantan sus brazos en clamando venganza y gritando furiosamente.
Viendo que la granada no pudo detenerlos, Godlik3 empuña su Emisor de Ondas Psiónicas, y avanza corriendo hacia ellos. Si su ataque funciona, quizás pueda mermar al enemigo en un tercio. Cuando la distancia entre ellos y Godlik3 es de algo menos de 10 metros, éste efectúa tres disparos de la mortífera arma. En el primer disparo, una gigantesca ola de aire a cientos de grados centígrados, y partículas a velocidades extremas, impactan contra la masa de humanoides, convirtiendo a decenas de ellos en una simple masa de carne y huesos astillados. El segundo disparo tiene el mismo efecto, y el tercero igual. En ese ataque quizás 80 ó 90 deformados fueron a pasar a mejor vida. Sin embargo, los que venían detrás parece darles igual el destino de sus compañeros, así que con una rabia febril, se dirigen ahora hacia vosotros.

Drake (Flynn Davis) que iba cubriendo a Godlik3 mientras éste disparaba ráfagas con su Emisor Psi, también hace buén uso de su arma, matando a quince o veinte criaturas.

Luego, viendo que el ataque de Godlik3 fue relativamente exitoso, ambos regresan a la retaguardia para protegerse y atacar desde lejos.

- ¡¡Maldita sea, no entiendo cómo nos pudieron descubrir!!
Le pregunta Drake (Flynn Davis) a Godlik3.

- Las luces, que lanzaron hacia todos lados, acabaron por iluminar nuestra posición.
Le responde Godlik3.

Una vez en terreno ventajoso, ambos disparan sin piedad a las criaturas, que sigen avanzando.

Torik (Dukebot), que se había resguardado detrás de una pequeña roca, espera a que estén suficientemente cerca, y comienza a disparar de disparo en disparo, hasta que se encuentren cerca, momento en el que se hecha hacia atrás, y continúa disparando.

Poco a poco van callendo, pero los caídos pronto son sustituídos por otros deformados, los cuales parecen no tener fin...

Por el momento parece que las criaturas avanzan muy lento, aún así, poco a poco consiguen alcanzar la parte baja de la colina en la que os encontrais. Una de las criaturas va ya a por Firemaster, que se encuentra cuerpo a tierra y disparando con su Fusil Gauss. Llama a varias de las criaturas que empiezan a subir por el montículo, y cuando se encaminan hacia él, coje una granada y se la lanza, matando a los cinco humanoides que se acercan.
Viendo que aún quedan muchos más de la mitad, Firemaster se levanta, recarga su Fusil Gauss y comienza a disparar sin tregua hacia la multitud, gastando en pocos segundos el primer cargador de balas. Los casquillos se amontonaban a sus pie, pero parece que el economizar munición no le importaba.
Algunos cadáveres se apilan y caen colina abajo.

Por otro lado, evitando que los seres nos rodeen, estaba Pandemonium, que consigue eliminar también a una buena cantidad de enemigos... A causa de los nervios de la batalla, agarra una piedra del suelo, pensando que es una granada, y la lanza hacia la masa de humanoides. Lógicamente la piedra no explota, y ahora se acuerda de que NO tiene granadas. Y así, sigue disparando.

Sin embargo, y a pesar de todos los esfuerzos y balas usadas, la multitud parece no tener fin. A cada deforme asesinado, siempre aparecen más.
Poco a poco, las balas se van agotando, las granadas se acaban, y las cargas del Emisor Psi de Godlik son consumidas.
Los deformes os obligan a retroceder, subiendo colina arriba. En cualquier caso, sin se acaba la munición, siempre hay la posibilidad de escapar por la parte trasera del montículo. Sin embargo, lo peor que podía haber ocurrido, ocurrió.
Por la parte de atrás de la colina, no había escapatoria. Un profundo terraplén, de 30 ó 40 metros impedía vuestra retirada.

Ahora ya todo estaba perdido. Las criaturas ya habían rodeado todo el montículo. Sólo era cuestión de tiempo que los humanoides llegasen a la cumbre y os liquidase.
En pocos segundos, os veis redeados de centenares de deformes. Así que sacais vuestras armas cuerpo a cuerpo, preparados para una confrontación suicida, en la cual cada uno de vosotros estaría rodeado de diez deformes, a los cuales tendría que matar instantáneamente para no rebibir ningún golpe.

Sin embargo, la batalla cuerpo a cuerpo no se llega a producir.
En cuanto los deformes os rodean por completo, formando un círculo a vuestro alrrededor, se detienen. Siguen igual de iracundos, pero no avanzan, como si algo o alguien les impidiera mataros y finalizar así con vuestras insignificantes vidas.
De repente, los bichos se callan, y una fuerte voz, que parecía salir del mismísimo infierno, se olle al otro lado de la multitud:

- "...Muy bién mis valiente guerreros... Veo que vuestro valor no tiene límites. Vuestra pericia con las armas es excelente, y vuestros conocimientos como guerreros son exquisitos..."
La voz se interrumpe por un momento.

- "...Sin embargo, os falta una cosa. Sin ella, nunca podréis sobrevivir en esta planeta. Ni en este ni en ninguno. Se trata del Poder de la Muerte..."
La voz se calma de nuevo.

Comprobais que la masa de deformes, por la parte baja del montículo, empieza a separarse, abriendo un camino. Sin embargo, no veis a nadie caminar por él.

- "...Alguien que teme a la muerte es débil..."
Continñua la voz, ahora más cerca. Sin embargo no se ve a nadie que hable.

- "...Los que temen a la muerte, pronto se encontrarán con ella, pues el temor es una fuente de debilidades que reblandecen el corazón de los guerreros..."

La multitud se sigue separando, hasta que el camino llega hasta vosotros.
Ahora la voz suena a vuestro lado:

- "...Y los guerreros temerosos morirán en el campo de batalla, deshonrando a su bandera y a su propio nombre..."
Esta vez la voz se olle justo en frente vuestra.

Preparais una vez más las armas cuerpo a cuerpo, esperando ver salir a quien está hablando, pero no es eso lo que veis.
Justo enfrente vuestra, el aire se comienza a mover extrañamente. Hay una distorsión en el aire, como si hubiese un cristal deformado que impide ver bién lo que hay tras él. Poco a poco parece obtener alguna forma concreta, hasta que finalmente se materializa en forma de humano. La distorsión empieza a tomar un color marón, como de ropas de cuero, hasta que al final, tras cambios caóticos en la forma y color, se transforma definitivamente en un ser humanoide.

Era alto, fornido, y vestía unas ropas de cuero y tela negra, con cráneos adornando, y en su cabeza, un casco metálico, de color negro, cubría su rostro. Por su espalda, colgaba una capa roja.

- Yo os puedo enseñar a ser los mejores guerreros del universo. Yo os puedo enseñar a ser Dioses.
El extrano ser miraba fijamente para vosotros. Sus ojos, que se podían distinguir tras la máscara, brillaban con un tono rojo muy intenso.
Y diciendo esto, giró la cabeza, señaló a uno de los deformes, y haciendo un gesto con la mano, éste comenzó a sangrar por la boca, y por los oídos, hasta que finalmente se derrumbó, rodando colina abajo, y dejando un regero de sangre.

- ¿Lo veis? Esto sí es poder. Sangre en tus manos y sangre en el rostro de tu enemigo. Los humanos temeis ver sangre en vuestro propio rostro, pero un Caballero de la Oscuridad no teme nada.
Un Caballero de la Oscuridad sólo teme una cosa: Morir fuera del campo de batalla.

Y haciendo gestos, va matando a algún que otro deformado. Parece disfrutar quitandoles la vida a los seres inmundos...

- Esto es lo que os ofrezco... Sólo os pido a cambio que seais leales a la Orden de los Caballeros Oscuros, y ofrezcais vuestras vidas al Gran Señor de la Oscuridad. Mirad otra vez lo que podeis llegar a ser.

Y señalando a vuestras espaldas, veis cómo otra distorsión en el aire comienza a tomar forma, transformándose en una especie de Lobo Espacial.
Vestía una armadura Negra, con algunos detalles de color rojo. El casco sobre su cabeza lucía unos largos cuernos que se alzaban un palmo por encima del casco. Sin embargo, no se distingía rostro alguno. Dentro del casco reinaba la oscuridad más absoluta.
El caballero, moviéndose lentamente, empieza a dar vueltas a vuestro alrrededor, emitiendo un sonido extraño, como un espectro.
Pero a poco de observar su rostro, el caballero desaparece, dejando un pequeño rastro de niebla.
Pasa un segundo, y aparece a vuestras espaldas, y así varias veces, como intentando demostrar que os puede matar cuando quiera...

- ¿Lo habeis visto? Y eso es sólo una mínima parte del poder que llegareis a tener.
El "líder" parece que termina de hablar, sin embargo no hay ninguna pregunta que responder...

- Así pués, elejid vuestro destino AHORA. Uníos al ejército de los Oscuros, o morid como débiles humanos, olvidados en el abismo de la oscura muerte eterna. La decisión es sólo vuestra...

Y ahora sí, ya parece desear una respuesta...

[Godlik3]

......

Mierda... esto ... sera esto el fin?....

Miro a mi alrededor.. amis compañeros totalmente desconcertados al igual que yo... nose que hacer.... sigo mirando y veo a estos dos "caballeros Oscuros".... podrian matarnos en un abrir y cerrar de ojos... y ademas de eso... estan los amorfos soldados.... rodeandonos... atras nuestro un precipicio de 40 metros mas o menos... la muerte es casi un echo..... tomo mi dije con fuerza...

Godlik3: ... no puedo fallarle...

Y sin mas que pensar, le digo: Nadie me controla!!!!!

Utilizo TODO mi poder Psy y lo concentro, para asi si tengo que utilizarlo en un caso extremo, ellos tambien caigan con nosotros..

edit. 6/05/06 9:24

[Flynn Davis]

Me quedo perplejo al ver lo ocurrido. ¿Por qué no nos matan? No lo entiendo. ¿Y el corgao este quien es? Los Oscuros deben tener un gran ejército, ¿para qué necesitan a 4 pringaos como nosotros?. Vuelvo a repetir mis pensamientos en voz alta para que los demas me escuchen.

-Estoo... ¿Comanche? ¿Alguna idea?

No sé si me queda alguna bala o granada pero ¿para qué?, por muy poco que tenga no podremos acabar con TODOS, pienso, si tengo que morir a manos de un zombie alienigena prefiero morir colocao. Así que mientras los demás se deciden qué hacer yo me lio un buen porro y me lo fumo tranquilamente, tb ofrezco a mis compañeros.

Y Rezo lo que sepa.

[Dukebot]

Me quedo quieto un momento y me digo a mi mismo, no este no sera mi destino, servir a los oscuros? Pero que se han pensado que soy? No llegare a ser el mejor si no puedo vencer a un pallaso como esto, y acto seguido, saco  mi fusil de acceleración alpha y como siempre tengo mi espada laser colgada de la cintura por si la tengo que usar.

- Torik: Vamos camaradas, esto no es el final, pongamonos en circulo para poder defendernos de todos los costados.

NUNCA me unire a las fuerzas oscuras, ademas si no soy capaz de vencer a un pallaso como este, jamas podre llegar a ser el mejor asi que esto es vencor o morir!

Me preparo para la batalla y me pongo en posicion de defensa, osea, no ataco a nadie a menos que me ataquen.

[Eye del Cul]

Miro al sujeto que nos ha estado hablando:
¿Unirnos a los Oscuros? No es una decisión que pueda tomarse a la ligera. ¿Qué se supone que hay que hacer? ¿Qué ofreces? Y en todo caso, danos tiempo para meditarlo. Como bien dices, quién teme a la muerte es débil; ni se te ocurra pensar que dudaremos en morir luchando si hace falta..., y te aseguro que todo tu ejército de engendros nos acompañará al infierno si se da el caso. Así que mejor haz una buena oferta.
Desenvaino el cuchillo, saco mi pistola con la mano izquierda y miro desafiante a la multitud.

[FireMaster]

miro al tipo que nos ha hablado y pienso: unirme a los oscuros: UNA MIERDAAAAA!!!! recargo discretamente mi arma y preparo la una de mis armas cuerpo a cuerpo,

sigo atento a lo que pueda pasar

[Flynn Davis]

Escucho a los demas y estoy de acuerdo con Comanche.

-No hagais nada a menos que nos ataquen, si lo hacen y morimos, algunos de esos hijos de puta se vendrán con nosotros -susurro a mis compañeros. Luego le hablo al ser-. ¿Por qué haces esto? ¿Por qué nos ofreces ese poder del que hablas? No lo entiendo. ¿Quien eres y qué haces aqui? -le doy una calada al porrito- ¿Gusta? -le ofrezco- ¿Alguien quiere?

Dicho esto me preparo como los demas.

[Ronald]

a la mierda....

si tu nos ofreces eso ¿porque no tienes un ejercito mas poderoso? ¿porque no enseñas a los tuyos el verdadero poder? eso solo puede significar una cosa ...que eres uno de los oscuros de baja categoria  que solo tienes poderes limitado y que hay mejores que tu.... ¿crees que con esos trucos nos puedas convencer? lo que tu tienes es solo mas experiencincia con el poder PSI

cargo mi fusil gauss y me preparo para la batalla  :evil:

[Karnizero]

*** 6 de Mayo del 2006, 22:15 ***

Después de la dura confrontació, y de la aparición de los dos Caballeros Oscuros, comienza un extraño diálogo, y los primeros odios entre vosotros y ellos.

Teneis dudas en vuestras mentes, y también temores a vuestro incierto destino.

Vuestras preguntas y amenazas vuelan hacia los Caballeros Oscuros.

- ¿Quién de vosotros es el que está al mando? Alguno de vosotros tendrá algo de cordura...
Dice el Caballero Oscuro, mientra parece ponerse algo más "nervioso" a causa de vuestra reacción agresiva.

- Yo estoy al cargo de ellos.
Responde Comanche (Eye del Cul), dando un paso al frente.
El Caballero con la armadura negra, aparece de repente frente a COmanche (Eye del Cul), y lo mira fijamente.

- ¿Por qué nos ofreces que nos unamos a vosotros? Si vuestros ejércitos son más poderosos que los nuestro, ¿por qué razón lógica necesitarías a unos soldados como nosotros? ¿por qué nosotros? ¿Qué es exactamente lo que nos ofreces y lo que nos pides? Si la muerte produce temores, entonces nosotros no temeremos morir luchando, pero lucharemos contra vosotros...
Muchas son las preguntas que salen de la boca de Comanche (Eye del Cul), y las cuales comienza a responder el Caballero.

- Nuestro ejército se aproxima a esta galaxia rápidamente. Ningún humano sobrevivirá. Si os pido que os unais a nuestras filas, es por que vuestro valor ante estos infelices deformados, ante el propio planeta, es digno de orgullo. Sin embargo, cuando llegueis a mars VI, con los demás soldados, nadie gritará vuestros nombres, como héroes que sois. Sólo os espera más sufrimiendo viendo a vuestros hermanos morir sufriendo, en algún rincón del espacio.
Yo sé valorar a quienes demuestran valor y sabiduría en el campo de batalla.
Os ofrezco exactamente un poder inimaginable. Gloria, a vuestras espaldas. Millones de humanos se arrodillarán ante vosotros, dominados por vuestra fuerza superior. Nadie se opondrá a vosotros, sin saber que va a morir. El poder del miedo en los ojos de tu enemigo. El poder de controlar ejércitos de Oscuros, que arrasan sin piedad los campos de batallas. Podreis conseguir todo aquello que habeis deseado siempre, incluso podréis estar al lado de los que más queríais, y alguien os ha arrebatado.
Dice esto último mirando hacia Drake Ramoräi (Fynn Davis)

- El poder de la muerte es inmenso. Algo que no se puede explicar. Todo lo que deseeis, lo podreis tener.
Lo único que se os pide, es que os ofrezcais en cuerpo y alma al Garn Señor Oscuro. Cuando seais reclamados para la batalla final, tendréis que estar allí, apoyándole y ofreciéndole vuestras vidas si es preciso.

Pero mientras el Caballero hablaba, Godlik3 se concentraba, intentando concentrar toda su energía psiónica en una única explosión devastadora.
Torik (Dukebot) agarra su espada láser, pero sin activarla, Comanche (Eye del Cul), hecha mano de su puñal reglamentario, y desenvaina su pistola. Los demás, de la misma forma disponeis vuestras armas cuerpo a cuerpo, ya que las balas ya habían sido consumidas.
El Caballero habla de nuevo, ahora con una voz algo enfurecida:

- Maldito Lobos Espaciales. ¡¡No hay nada que pensar!!. No sólo rechazais mi oferta, si no que también me insultais, así que ahora morireis como cucarachas, y yo mismo os mataré y sufrireis en el abismo del infierno.
No pidais clemencia, por que no tendré clemencia con aquellos que me rechazan y que se oponen al Gran Señor de la oscuridad. ¡¡¡Ahora sí vais a temer a la muerte, y sufrireis en vuestras propias carnes cómo os arrebato la vida sin piedad.!!!

Sus ojos se transforman ahora en pequeñas piras ardientes, y del interior de su casco comienza a salir un reflejo rojo. Una estela granate lo rodea. Parece estar muy furioso, y en cualquier momento, haciendo uso de su poder, matará a todo aquel que se oponga.

Pero a poco de terminar su furioso discurso, un fuerte chillido, seguido de un rugido animal, se olle por vuestra izquierda. El Caballero que dava vueltas a vuestro alrededor, se detiene y mira hacia ese lado, y al momento, una horrenda criatura, mitad reptil, de piel ósea, de unos dos metros de altura y unas enormes garras de hueso en sus costados, salta y cae encima del Caballero. Sus garras suben y bajan ferozmente, y la armadura del Caballero es traspasada como un cuchillo a la mantequilla. No hay sangre, sólo un grito horroroso emana del Caballero. Pero el otro Caballero, viendo la situación de su conpañero, y rodeado de un aura roja que se movía como el viento, comienza a formar una gran bola de energía en su mano, también roja, y la cual se va concentrando más, hasta despedir un destello cegador. Y moviendo la mano hacia atrás, se prepara para lanzar su poder sobre la criatura que ahora hunde sus garras sobre el otro Caballero. Sin embargo, una sobra aparece tras él, y al momento, otra criatura igual a la primera, cae sobre él.
Ésta intenca clavar sus garras sobre las carnes del Caballero, pero éste, con un ágil movimiento, se desprende de ella, lanzándola con una patada hacia la multitud.
la criatura, tremendamente enfureciada, hace un giro sobre su cola, con las garras abiertas, cortando por la mitad los cuerpos de los deformes que la rodeaban. Pronto se le hechan encima más deformes, hasta que queda tetalmente cubierta por ellos. El Caballero, que contemplaba la escena, se ríe malévolamente. Sin embargo, no se da cuenta de que mientras una de las criaturas se entretenía cortando cuerpos deformados, la otra se le acercaba por la espalda amenazadora y sigilosamente, tras haber acabado con el primero de los Caballeros.
La criatura se eleva sobre el que aún quedaba con vida, y con un rápido movimiento de sus garras, intenta decapitarlo, sin embargo, sus garras apenas arañan el casco, que le protegía el cuello y cabeza.
El Caballero, al verse sorprendido, cae al suelo, mientras la criatura intenta morderle. Sin embargo, el caballero alza sus manos hacia la criatura, apretándole fuertemente por el cuello.

La criatura comienza a chillar, seguramente por el dolor, y es ese el reclamo para que el bicho que se entretenía con los deformes, se abra camino entre ellos, y de un mordisco le arranca el casco al Caballero. Éste, al verse desprotegido, intenta deshacerse de sus enemigos, pero sin embargo ya es demasiado tarde. La criatura que le había arrancado el caso, dirigía su afilada garra hacia la cabeza del Caballero, impactando de pleno en ella.
El impacto es brutal. Hasta la más fuerte coraza no resistiría un golpe así.

El Caballero grita, y de su cuerpo comienza a emanar un vapor rojo intenso, que pronto se comienza a disipar.
Ahora, las criaturas se encaran contra el resto de la multitud, destrozando cuerpos a diestro y siniestor, y cortando la retirada, de un salto, a aquellos que intentaban escapar.

Mientras tanto, y viendo que la situación se ponía mal para vuestros enemigos, pensais que es el momento ideal para escapar de ese maldito lugar, así que os alejais a paso rápido bordeando el terraplén.

A lo lejos, aún se ollen los agudos chillidos de las criaturas, y de vez en cuando alguna sobra se arroja por el borde de la colina.

Alcanzada una distancia prudente, lograis encontrar un pequeño valle, con grandes rocas en su interior.
Os deteneis un rato, para valorar vuestra situación:

- Bueno, aquí hemos llegado. De milagro. Esas criaturas nos han salvado, pero igual que atacaron a los Caballeros, nos pudieron haber atacado a nosotros.
Revisemos la situación: Primero la multitud nos intenta matar. Luego los Caballeros nos Asaltan. Y finalmente aparecen las criaturas. No quiero suponer nada, pero se parecen demasiado a la cría que hemos matado.
Por otro lado, estamos cansado, o por lo menos yo estoy cansado. No sólo la batalla, si no los nervios de lo sucedido después. Estamos sin armas. Sólo disponemos de cuchillos, y alguno de espada láser, así que como aparezcan por ahí las criaturas, estamos acabados. Si pudieron matar a los Caballeros Oscuros, con nosotros pueden hacer lo mismo.
Así que tenemos que pensar una estrategia.
Ahora sí, la decisión que tomemos nos puede matar o nos puede salvar, así que pensemos con cuidado.
Esperad que miro... mmmm calculo que en este planeta son las 5:45 de la mañana. Pronto saldrá el sol. Mirad, allí, en el horizonte, el sol ya empieza a colorear el cielo. En una hora, el sol comenzará a iluminar esta cara del planeta...
Pensemos rápida y cuidadosamente la estrategia...
Dice Comanche (Eye del Cul), mirando su Dispositivo de Posicionamiento, y contenplando el cielo en el horizonte.

- Bueno, ¿qué opinais vosotros? Pensad rápido, pues las criaturas no tardarán en acabar con los humanoides, y vendrán a por nosotros...

[Flynn Davis]

Drake resoplaba de cansancio, tras oir a Comanche no tenía ni idea de lo que decir o hacer. Se tranquilizó y echado en una roca comenzó a recobrar el aliento.

-La verdad es que me ha sorprendido el ataque de las babosas adultas, podrían habernos atacado a nosotros directamente. Si recordamos a las crias ya os dije que atacaba a quien le amenazaba, pero los oscuros no la estaban amenazando. Se me ha ocurrido, que puede que esas criaturas las manejes otros humanoides que a lo mejor estan de nuestro lado o que son enemigos de los Oscuros, puede que sean humanoides que vivan en este planeta debajo de la gruesa capa de piedras, quizás ahí esté lo que estén buscando los Oscuros -hago una pausa aclarandome la garganta-. Aun así, no debemos salir y darles la mano, porque solo son suposiciones mias.

Saco el mapa que encontramos y señalo la cruz roja

-Este es el punto clave, donde están los malos si nos metemos ahi será nuestra perdición, pero quizas si nos dirigimos hacia estos otros puntos -señalo los lugares en el mapa donde estan señalizados con una raya roja-, puede que encontremos armas o munición con la que defendernos. También cabe la posibilidad que en esos lugares haya mas Oscuros. La verdad es que lo tenemos muy dificil.

Me quedo en silencio esperando a que alguien diga algo pero al momento se me ocurre algo mas que decir.

-Dentro de nada debemos mandar un informe. Podemos decir lo que nos ha pasado, con alguna mentirijilla, seguimos vivos y eso pero que a nadie se le ocurra decir que no nos queda bala alguna, eso supondrá que ellos piensen que sin armas no lograremos acabar la misión y entonces, sin avisar, destruiran el planeta. Si los conoceré yo. Podemos decirles que nos atacaron, nos defendimos y logramos escapar por unos túneles que encontramos y que nos volvemos a poner en camino para realizar la misión. ¿Qué decis? ¿A alguien se le ocurre algo mejor?

[Godlik3]

Retomando el aliento y con un fuerte dolor de cabeza, escucho las palabras de Drake, las cuales realmente me parecieron tener sentido. Asi que le di mi "OK", esperando asi la respuesta de los otros.

[Eye del Cul]

-Bueno, lo más inmediato me parece buscar un sitio en el que descansar y resguardarse del calor que está por venir. Respecto a las criaturas, si de verdad se trata de las crías adultas, no deberíamos temer nada de ellas durante el día; recordad que no parecen tolerar bien el calor, y probablemente se esconderán en algún lado hasta la siguiente noche.
Por lo demás, estoy de acuerdo con Drake en lo que respecta al informe de la misión; no deberíamos comentarles que tenemos muy poca munición...

[Ronald]

como dice el dicho: EL ENEMIGO DE MI ENEMIGO ...ES MI AMIGO

sabemos que esas criaturas tiene un gran poder ...podemos hacer una tregua con ellos (si es que son inteligentes) y tambien nosotros estabamos con las armas dispuestos a disparar sin embargo ellos atacaron a los oscuros... en definitiva son sus enemigos.... por que estarian invadiendo su habitad

por otro lado estoy de acuerdso con Drake ...

[Dukebot]

Torik: hacer treguan con esas criaturas inmundas que casi me parten en dos y me rebanan el cuello???