[PARTIDA] El altar de la Oscuridad [PARTIDA]

[FireMaster]

ESTOY VIVOOOOOO!!!! ni yo mismo me lo creo

[Karnizero]

*** 7 de Mayo del 2006, 23:15 ***

Tras la feliz sorpresa que llevaron los Caballeros, las criaturas, que eran muy similares a crías que habíais visto, se quedaron matando a los deformes. Bién por diversión bién por simple instinto, y mientras estaban entretenidas en su "fiesta", vosotros aprovechásteis para escapar disimuladamente.

Finalmente, con los gritos de la pelea a vuestras espaldas, llegais a un pequeño valle entre dos cerros.
El lugar parece mínimamente seguro, o por lo menos seguro hasta que se haga de día.
La munición brilla por su ausencia. Sólo disponeis de una escopeta de combate perteneciente a Godlik3 y de sus poderes mentales. Se podría decir que estáis más indefensos que un bebé.

- Bueno, por lo que parece, el sol ya está saliendo. Son casi las seis de la mañana. Ya empieza a hacer calorcillo...
Comenta Drake (Flynn Davis), mirando hacia el horizonte rojizo.

- Sí, los días en este planeta son muy cortos. Ya llevamos dos días aquí, y aún no hemos alcanzado la mitad del camino de ida...
Se queja Ronald, comprobando las palabras de Drake (Flynn Davis).

- Tranquilos, mis niños, que no todo está perdido. Aún estamos empezando la misión, y estoy seguro de que nos va a salir bién...
Dice Comanche (Eye del Cul), intentando tranquilizar a Ronald.

- Lo que tendremos que hacer ahora, es buscar un sitio para descansar durante los calores que se avecinan. Creo que las criaturas esas no toleran el calor, así que de día estaremos protegidos de ellas. Sin embargo, cuando el calor se rebaje un poco, saldremos de donde estemos, y apuraremos lo más que podamos. Así ganaremos tiempo y nos evadiremos de las criaturas. Lo del informe, creo que Drake (Flynn Davis) lo ha dicho todo.
Explica Comanche (Eye del Cul), mirando también al cielo, y hacia el fondo del valle.

- La idea me parece correcta, pero quizás las criaturas no sean nuestras enemigas. Si lo fueran, ¿por qué razón atacaron sólo a los Caballeros y no a nosotros? Quizás podamos hablar o intentar entendernos con ellas, si es que tienen un mínimo de inteligencia... Quizás...
Dice Ronald, cuando es interrumpido por Torik (Dukebot):

- NI DE COÑA...¿Pensais que tengo ganas de "hablar" con esos bichos, que casi me rompen el cuello? Te lo repito bién claro: ¡¡NI DE COÑA!! Esos bichos sólo merecen la muerte...
Grita Torik (Dukebot), con la cara toda enrojecida.

- Bueno, bueno, tranquilidad, no nos sulfuremos ni hagamos más ruído del conveniente. Lo importante es que hemos salido con vida, y ahora tenemos que buscar un sitio para resguardarnos, tal y como dice Comanche (Eye del Cul).
Dice FireMaster, mirando a Torik (Dukebot) y Ronald, a la vez que afirmaba con la cabeza.

- ¡¡Mirad!! Allí, en el otro lado del valle
Dice Pandemonium, que llevaba un buén rato observando los alrededores.

- Parece una cueva. Quizás sea un buén lugar para resguardarnos. Vamos a ver lo que es, quizás sea nuestra salvación.
Pandemonium, señala una pequeña abertura en la falda de una de las colinas que rodeaba el valle.

Os acercais con un sigilo felino, por si acaso la dichosa cueva tiene comensales dentro.
Al estar al lado, parece bastante grande. Unos tres metros de altura, y la profundidad... Indefinida.
El interior parece vacío. Ni un sonido, sale de la cueva. Además, parece que dentro hace fresquillo.
Entreis despacio, y tras tomar algunas medidas de seguridad, la explorais. Al fondo de la cueva, las paredes están algo húmedas, con algunas gotas que rezuman por las paredes, y desde la boca de la cueva, se ve todo el valle. Es un buén lugar para descansar.

Finalmente, decidís adoptar el lugar como vuestra segunda casa, y así, os sentais en el suelo, descansando hasta que sea la hora de partir.

Y así pasan las horas, al fresco de la caverna, mirando hacia el valle.
El sol ya ilumina el pétreo suelo del valle, y por la boca de la cueva, entra un ligero calorcillo. Pero hacia el fondo de ésta, se está en el paraíso.

Ahora que ya teneis tiempo de descansar tranquilamente, os acordáis de vuestros estómagos. Scais una galletita superenergética y supernutritiva, y bebeis un largo trago de vuestras cantimploras.

Ya pronto llega el medio día. En el esterior la temperatura está en su cúlmen. Los 50 grados de antes, se repiten, pero a vosotros os da igual. Ni crías ni deformes ni calores os molestan ahora.
Mientras no llega el atardecer, os quitáis las armaduras y os poneis más cómodos. Mientras algunos tomais una siesta, otros charlais, y otros vigilais.

Al cabo de varias horas, el sol parece que ya no pega tan fuerte, así que decidís salir de la cueva, y prosegir el camino.
La temperatura fuera es bastante agradable. Unos 30 grados como mucho.
El valle no tiene ningún camino para salir de él, así que habrá que ir ascendiendo por la loma, y luego bajar por el otro lado. Y así, os poneis en marcha de nuevo.

A lo lejos, el sol alumbraba todo el perfil del planeta. Era una visión banita. Se distinguían perfectamente las sombras de los cráteres, colinas y relieve variado del planeta.
Sin embargo, no os podeis detener a contemplar el planeta. La misión sigue en pié, así que hay que apurar.

La caminata continúa hasta el anochecer. El valle ahora queda ya muy atrás. Algunos ya estais cansados, pero el recuerdo de lo sucedido la noche pasada, os mantiene despiertos, y con ganas de seguir adelante. De vez encuando, miráis hacia vuestras espaldas, ya que el camino recorrido quizás sea más peligroso del que aún resta por recorrer.

Ya bién entrada la noche, buscáis algún sitio para resguardarse, ya que el viento y el frío acechan de nuevo.
Una profunda grieta en el suelo macizo os sirve esta vez com ocama improvisada.
Deseais profundamente que esta noche no suceda nada extraño, y así es. La noche transcurre tranquila, hasta el amanecer, momento en el cual continuais caminando en dirección hacia las coordenadas en las cuales está la prospección minera de los Oscuros.

Finalmente, rebasadas las colinas que ibais rodeando, os topais con el cañón que habíais evitado. Ahora, hacia el suroeste, queda la pista de aterrizaje, en la que todo empezó. Y hacia el este, debería estar la mina que andais buscando. Ahora, todo parece una gran llanura. Ni una sola colina, ni cuevas ni nada parecen verse en el horizonte.

Sin embargo, allí, muy en la lejanía, un mínimo punto adorna el horizonte. ¿Será la tan deseada mina? Quizás...
Y así, al ver aquello, recobrais las fuerzas perdidas, y continuais caminando.

Pronto el sol comienza a irradiar la superficie, sin embargo no parece haber sitio alguno para resguardarse. No queda otro remedio que caminar y caminar hasta que se encuentre un sitio para protegerse del calor.
Ya bién avanzado, a 500 metros, una gran roca se alza por encima de la planicie, ofreciendo una generosa sombra para quien la quiera disfrutar.
Contentos por el descubrimiento, apuráis un último esfuerzo para llegar a ella.
Os sentais a la sombra, y descansais. Vuestras respiraciones sobresaltadas, parecen acompañar a vuestros rápidos latidos de corazón.

A lo lejos, pero algo más visible, algún tipo de construcción spbresale ligeramente por encima de un valle por debajo del nivel de la tierra.
Se trata de una prospección minera.
Las sucesivas excabaciones, harían que ese valle fuese ganando profundidad. La construcción pricipal, siempre se suele hacer al borde del valle.

La noche llega, y ahora, más que nunca, desconfiais del horizonte. Cualquier ruído, cualquier luz, cualquier movimiento, podría ser la muerte, gritando de nuevo vuestros nombres.
Sin embargo, la noche pasa, y nada sucede.

Quizás la misión no resulte tan difícil como antes. Sin embargo, aún os queda el regreso. Pero eso ya es otra cosa. Ahora lo importante es llegar a la mina, y conseguir todo lo que se pide en los papeles de la misión.

La madrugada llega, y ya son tres días los transcurridos desde que comenzasteis a andar. Un día más para llegar, robar documentos o cosas interesantes, y luego otro para huír. Aún nos quedarían dos días mas para regresar a la pista de aterrizaje, y al conocer mínimamente el camino, entonces el regreso se hará más rápidamente.

y así, durante la madrugada y el atardecer venideros, caminais a paso ligero, sin perder tiempo, sin hablar, sólo pendientes de que la construcción del horizonte se hace más y más grande...

Y finalmente, aparece ante vuestros ojos, cuando la noche ya está bién entrada.
Hechais una ojeada al edificio metálico, pero parece abandonado. Está todo oxidado, las ventanas rotas, las grúas sin cables, ninguna luz se ve encendida...

- Maldita sea... ¿Nos habremos equivocado?
Dice Godlik3.

- Espera que miro mi dispositivo... Mmmmm Pues no, parece que este es el sitio. Quizás el edificio esté abandonado, pero en el fondo de la mina puede que halla Oscuros trabajando...
Contesta Comanche (Eye del Cul), intentando distinguir algo nuevo...

- Esperad todos aquí. Pandemonium y yo iremos a explorar la mina a ver qué vemos. No os movais. Si sucede cualquier cosa, o veis algo extraño, avisadme al dispositivo de almacenamiento, con la luz azul. No hagais ningún ruído. ¿Ok?

Y así, Comanche y Pandemonium avanzan hasta el borde del valle hundido para explorar qué hay allí...

::::
Eye del Cul/Pandemonium: El silencio en el sitio es absoluto. Al principio dudais de si asomaros al borde o no, pero si hay silencio, es difícil que algo se esté moviendo, así que con la valentía que os caracteriza, asomais un poco la cabeza, por el borde.
Mirais hacia abajo, hacia la profundidad, y tras observar detenidamente, descubrís la razón de por qué ese silencio y tranquilidad.
En el fondo, varios puentes metálicos cruzan el valle. Cintas transportadoras, grúas, pequeños carros de mina. Sin embargo, nadie está allí para manejarlos.
Hay algo extraño allí. La oscuridad no os deja ver bién...
Pero vuestro sentido de exploradores, hace quepodais distinguir más cosas: por los puente y por todos lados, hay cadáveres de humanoides deformados. Todos horriblemente mutilados. Un Caballero Oscuro yace en el interior de uno de los carritos de la mina...
Otro oscuro, con ropas de cuero, está colgando de uno de los puestes, balanceándose levemente por efectos de la corriente...
Un foco, parpadea indefinidamente, alumbrando unos restos humanos indefinidos.
¿Qué narices ha pasado ahí abajo? Si se han peleado entre ellos, mejor que mejor, así teneis el camino libre para bajar, y cojer todo lo que se necesite.

Después de haber comprobado el panorama, regresais con vuestros compañeros...

[Ronald]

quiero una cerveza... ¿alguien tiene una? :evil:

[Flynn Davis]

-Me parece que el barril de cerveza nos lo dejamos en la nave -le contesto a Ronald sonriendo-. La verdad no creo que se hayan matado entre ellos, seguramente habrán sido las bestias esas. Quizas vivan bajo tierra y al invadir los Oscuros su "casa" pues la estarán defendiendo, es lo que haríamos todos. Ademas decís que los cuerpos están mutilados, ¿no? Parece que todo encaja. Vuelvo a decir que son suposiciones no que sea lo que de verdad haya ocurrido.

Me dirijo a Comanche.

-Bien, jefe, ¿ordenes? ¿Bajamos y aseguramos la zona y buscamos lo que tengamos que buscar ahí abajo o nos vamos a otro sitio? Aunque no me hace ninguna gracia dormir al lado de un cuerpo mutilado de Oscuro o zombie por muy muerto que esté.

Me acercó a Godlik3.

-Oye, ¿crees que podrás usar tus poderes para saber si hay peligro ahí abajo o para saber si hay algo vivo?

[Godlik3]

Godlik3:Si Drake eso mismo estaba por hacer.

Me concentro y trato de ver "mas alla de lo evidente"

Luego de eso, decido ceder mi escopeta de combate (5) mas la caja de cargadores (10) a Comanche y que este o bien la utilize el, o se la de a quien crea apropiado.

[Dukebot]

Torik: Bueno, propongo que procedamos con sigilo y cautela, quien sabe lo que nos aguarda en la oscuridad.


Saco mi escopeta de combate y la preparo. Luego me siento en una piedra y espero que alguien diga algo.

[Eye del Cul]

Esto parece raro. Quizás excavaron en la mina hasta que encontraron algo indeseable... De todas formas, sea lo que sea, no tenemos otra elección que investigar las instalaciones. Para eso estamos aquí, ¿recordáis? Hay que averiguar que hacía esta gente por aquí, y qué es lo que ha pasado, e informar a la base..

Le devuelvo la escopeta y los cargadores a Godlik.
A mí no me servirá de mucho. De todas formas tengo la pistola.

[Karnizero]

*** 8 de Mayo del 2006, 23:30 ***

Tras llegar a la mina, en medio de la gran planicie, los exploradores del grupo averiguan por qué el silencio es absoluto.
Al parecer, los trabajadores de la mina estan todos muertos, y las causas son desconocidas.
Ya es de noche. Las 23:30, o quizás más tarde. Sólo un foco parpadeante ilumina a lo lejos los restos de uno de los zombis mutilados.

Al ver que no hay peligro a la vista, decidís acercaros a la pequeña construcción que está al borde de la mina.
Se trata de una pequeña caseta, con dos pisos y dos habitaciones en cada piso. De uno de sus laterales, sobresale una grúa corroída por el paso del tiempo.
El viento que se empezaba a levantar, hacía que las bisagras de las puertas del edificio crujiesen monótonamente.

Después de dudar un buén rato, explorar y tomar unas mínimas precauciones, entrais en la caseta, para intentar descansar durante esa noche.

Godlik3, se sienta en una caja metálica, y se concentra, para poder usar sus poderes Psi. Intenta tener alguna visión de lo que ha pasado allí, o de si hay alguien por la zona.

La concentración aunemnta, hasta que caes de nuevo en un estado de éxtasis. Cualquier interrupción en ese estado, supondría la muerte instantánea.

La oscuridad cubre ahora tus pensamientos, y una extraña distorsión comienza a aparecer tras la oscuridad.
Parecen personas moviéndose y agitándose. Te intentas concentrar en esas imágenes, pero no lo consigues. te fijas bién en las borrosas imágenes, y consigues ver que algunas "personas" tienen algo brillante por el cuerpo. A algunas les brilla una pierna, a otras un brazo, otras parte del torso... Es un brillo metálico, como si llevasen trozos de armadura... También distinges que hay humanoides deformados, similares a los que habeis matado hace tiempo. Si pudieses obtener más poder Psiónico, quizás podrías conseguir mejores visiones... Al fondo... parecen tuberías... Sí, parece un pasillo de una fábrica, o de algo parecido, con tubos por el techo y paredes. Los sonidos están también muy distorsionados... Aún así, parecen sonidos de algún sitio interior. No hay duda, se trata seguramente de los pasillos de la mina...

Poco a poco, la oscuridad se va tornando en claridad, y pierdes difinitivamente la concentración.
Caes en un estado de leve inconsciencia, y finalmente, te despiertas, con un ligero dolor de cabeza.

Los demás, preguntais a Godlik3 qué vió, y os cuentalo de los humanoides con trozos de armaduras, los deformes y los pasillos.

Sin embargo, no lograste distinguir si se estaban peleando, si eran amigos o qué estaba sucediendo. Sólo se distinguía el rápido movimiento y nada más.

Los turnos de vigilancia nocturna son organizados, y unos descansan mientras otros vigilan. Y al revés, transcurridas unas cuantas horas.
Parece que esta noche tampoco va a pasar nada especial. Aún así, dormís con un ojo entreabierto, ya que los deformados de abajo, quizás sean algún mal augurio...

Pronto la madrugada llega, y tras despejaros, os poneis en pié y comeis algo de la comida que llevais.

- Bueno, parece que al final hemos llegado a nuestro destino. Ahora sólo nos queda bajar allí abajo, investigar qué sucede, y luego regresar a la pista de aterrizaje, y sólo nos quedan 3 días. Así que hoy tenemos que investigar, y comenzar el regreso.
Comenta Comanche (Eye del Cul).

- Estoy de acuerdo. El tiempo se nos hecha encima, así que pongámonos manos a la obra. Pero antes, creo que lo ideal es buscar algún arma, o algo que nos pueda servir por si acaso necesitamos protegernos. Quizás dentro de esta caseta encontremos algo. Miremos pues.
Dice Dukebot, pues las armas escaseaban, y la munición también.

Y así, os poneis a buscar cada uno por la caseta. El primer piso está vacío, Sólo quedan restos de cajas, una mesa y dos sillas, y poco más.
Subís por las escalerillas de ascenso a la segunda planta, y allí también parece que no hay nada. Sin embargo, investigando, encontrais un extraño aparato. A simple vista, parece una grapadora gigante, pero no lo es. Es de color rojo, con franjas amarillas. Por la parte de atrás, tiene una pequeña abertura, por la cual se supone que se introducirá algo. Por la parte de delante, tiene otra abertura, por la cual se ve una especie de disco grande, pero ovalado, muy afilado. Tiene un gatillo que al pulsarlo, quizás el disco salga disparado. Sin embargo, preferís no probarlo, ya que por lo que se ve, sólo tiene un disco, así que probarlo sería perder el único disparo que tiene.
Si éste saliese con potencia suficiente, podría matar a cualquier persona.

Parece que ya tenemos algo con lo que defendernos.

Seguis buscando, pero ya no hay nada que pueda ser útil.

Y así, decedís descender hasta abajo de todo de la mina para comenzar con la exploración. Quizás halla armas por algún lado.

Cerca de la caseta, un escalera metálica desciende hasta el primero de los puentes, que luego se une a todos los demás.
Con cautela, vais descendiendo, mirando hacia arriba, hacia abajo, hacia los lados... Y llegais al puente.
Éste se tambalea peligrosamente, a cada paso que dais. La rejilla que conformaba el suelo del puente, cruje bajo el peso de vuestras armaduras. Sin embargo, por el momento, parece que va aguantando.
Tras haber recorrido todo el puente, llegais a un entramado de puentes, que se dirigen hacia todas partes. Unos acaban en una pequeña cueva, y otros penetran en la profundidad de la tierra, bajo unos arcos metálicos que sujetan el techo y paredes, para que no se vengan abajo. En algunos puentes, se aposentan algunos carritos, llenos de arena, tierra y rocas.

Parece que la investigación será más fácil de lo que parecía, pues sólo hay tres pasillo que se introducen en la roca. Y quizás, con suerte, los tres estén comunicados.

Y así, os dirigís a una de los pasillos rocosos y metálicos.

Al llegar hasta la entrada, os fijais bién, que por las paredes, caen gotillas de agua, así que la humedad en ese sitio es considerable.
Comprobais que nada se acerque ni se mueva, así que poco a poco entrais. Vuestra "grapadora", como a habeis llamado, la teneis dispuesta para usar cuando sea preciso.
Poco a poco os vais introduciendo más y más en las profundidades de la tierra.
Los pasillo pétreos que había cerca de la entrada, se transforman ahora en pasillos metálicos, de acero, algo corroído, pero en general, en buñen estado. A través del suelo de rejilla, se puede ver un segundo suelo de piedra maciza. Las paredes tiene soportes para luces de neón, las cuales estan ausentes. Algunas tuberías por aquí, cables colgando por allá, y cada cierto tiempo, un túnel metálico asciende por el techo, hasta desaparecer en la oscuridad.

Pero lo que al principio parecía un simple pasillo, pronto se convierte en bifurcaciones y más bifurcaciones. Cada vez hay más tuberías, que cubren las paredes y el techo. Al suelo de rejilla, ahora es un suelo metálico compacto, formado por planchas metálicas encajadas entre sí.
Sin embargo, y a pesar de las decenas de bifurcaciones y escaleras que ascienden y descienden, por el momento seguís de frente, ya que al fondo, una luz roja parpadea sin sentido. Quizás sea una luz de emergencia.
Lo importante es que allí quizás hay algo interesante.
la luz emite un sonido eléctrico al parpadear, y al llegar a ella, veis una pequeña pantalla en la pared, bajo la luz:

"Zona Asegurada: NO"

¿Zona asegurada? ¿Asegurada de qué? ¿Asegurada con qué?
Sea lo que sea, parece que la seguridad no está asegurada, y valga la redundancia.
Y ahí acaba el pasillo. Mirais hacia los lados, y veis lo que parece ser una puerta. Metálica, de acero seguramente, muy sólida, con algunas ralladuras y abolladuras. En el medio de la puerta, se puede ver las dos piezas que hacen a la puerta encajar cada una de sus piezas, y adornándola, aparece un símbolo dorado, muy deteriorado: Un triángulo invertido, con tres franjas paralelas y diagonales. A su lado, un pequeño aparato con 9 botonoes numerados, del 0 al 9, permiten que la puerta siga cerrada mediante una contraseña, seguramente ya olvidada...

Quizás no sea recomendable cruzar esa puerta, o quizás tras ella esté todo lo necesario para finalizar esta parte de la misión.
Quizás la contraseña para abrir la puerta evita que ésta se abra y salgan de ella todos los demonios del infierno, o simplemente evite que nadie entre...

Este complejo minero, con pasillos metálicos es gigantesco. Sus bifurcaciones se cuentan a decenas. Quizás hay que investtigar un poco a ver si se encuentra algún sitio más interesante, o quizás meterse por las bifurcaciones hará que nos perdamos...

La cosa se complica llegados a este punto.

- ¿Qué hacemos ahora? ¿Abrimos intentamos "piratear" el sistema de contraseñas, o investigamos un poco más los diversos pasillos¿
Pregunta Drake (Flynn Davis), mirando hacia la sólida puerta.

[Ronald]

mejor seri atratar de abrir la puerta porque no creo que lo hubieran cerrado desde adentro... a lo mejor es una armeria pero si la abrimos tenemos que utilizar ese objeto que encontraron en el mismo centro de la puerta por si hay algo adentro...

[Eye del Cul]

Yo voto por abrir la puerta. ¿Algún manitas que sepa hacerlo?

[Flynn Davis]

-Yo también voto por abrir la puerta, aunque no sabemos que se esconde tras ella, si está cerrada será por algo. Puede que esté el mismisimo Satanás ahí dentro o que esconda miles de riquezas o tias buenas dispuestas a follar con nosotros (aunque creo que no tendremos tanta suerte). Torik (dukebot), tu sabias algo de electrónica, ¿no? ¿Crees que podrás abrirla? Godlik3 podría usar sus poderes para intentar adivinar la clave pero no quiero que te esfuerces demasiado podría ser perjudicial para ti. La última opción sería liarse a hostias con ella, pero a menos que tengamos un bazoca dudo que sirva de algo. Aun así, si logramos abrirla debemos estar preparados, preparad las pocas armas que tengais.

[Godlik3]

Godlik3: No te preocupes Drake, intentare concentrarme para ver si puedo ver la clave...

Y asi apoyo mi mano sobre pequeño teclado, y me concentro...

[FireMaster]

bueno si nada de eso funciona, propongo reventar la puerta a tiros!!!!!

aunque no creo que aga falta

[Karnizero]

*** 10 de Mayo del 2006, 15:30 ***

Tras caminar y caminar por los distintos túneles, llegais a una puerta metálica, de aspecto sólido, y con una inscripción en su interior.
La luz ya no llegaba hasta esa profundidad. Sólo los focos de iluminación de vuestras armaduras iluminaban.
Dukebot, que tiene ciertos conocimientos de electrónica, se ofrece voluntario para intentar abrir la puerta, utilizando el pequeño aparato con una contraseña.

El aparato, consta de una pequeña pantalla LCD y un teclado bajo la pantalla.
En la pantalla van apareciendo los distintos dígitos que se van marcando en el teclado.
Tras probar distintas convinaciones, la cosa parece que no se abre, así que de un certero golpe en uno de los tornillos del aparato, éste se abre, dejando al descuberto sus circuitos.

Durante un par de minutos, Torik (Dukebot) se concentra en los microchips del circuito, y en sus cables, para intentar abrir la puerta.
Pero en cierto momento, mientras Torik (Dukebot) manipulaba el circuito, comenzais a oír un extraño ruído. Procede de de encima del techo. Concretamente de una de las anchas tuberías que crizan longitudinalmente el techo. Es un ruído como de pasos. Pero pasos de animal pequeño, como si una rata corriese por la tubería, y se dirigiese hacia el fondo del interminable pasillo.

Sin embargo, estabais mirando a Torik (Dukebot) a ver cómo hacía la cosa, así que no le dais mucha importancia.

Torik, al cabo de un par de minutos, parece que termina de encontrar la forma de piratear el dispositivo de apertura de la puerta, y haciendo una serie de empalmes, y uniones extrañas, en la pantalla del dispositivo comienzan a aparecer números.
Poco a poco los números conforman lo que parece ser la contraseña de apertura de la sólida puerta, hasta que la secuencia se completa, y con un ligero pitido, la puerta pparece desbloquearse y abrirse hasta la mitad.

- ¡¡Genial!! Lo hemos conseguido, veamos que nos depara el futuro tras esta puerta...
Dice Comanche (Eye del Cul), mientras enfoca su linterna de iluminación hacia el interior de la nueva estancia.

El interior estaba completamente oscuro. No se veía nada. Firemaster, que es el más atrevido, abre poco a poco la puerta, mientras los demás iluminais con las linternas, y los que disponeis de armas apuntais hacia el interior.
Sin embargo, no ocurre nada.
En cuanto os acercais un poco más, notais un fuerto olor, intenso, a putrefacto, lo cual os dá náuseas. Quizás restos de comida putrefacta, o quizás algún animal muerto...
Nada más entrar, se ve en la pared contigua a la puerta un pequeño botón, iluminado retrospectivamente con una luz blanca.

Pulsais el botón, y las luces se encienden parpadeantemente, sin embargo, os arrepentís de haber encendido las luces, ya que el horror que allí se vé es indescriptible.

En el suelo, apollados en las paredes y por todos lados, se ven cadáveres de zombis deformados, iguales a los que habeis matado hace días. Están todos apilados, y sin embargo, no tienensignos de violencia extrema. Casi todos tienen alguna perforación por ciertas partes de su cuerpo. Pequeñas perforaciones, como de balas, quizás... Sin embargo, tampoco hay balas ni casquillos tirados por el suelo.

En la estancia, también hay dos estantes, uno con Fusiles Gauss y otro con munición para fusiles Gauss. Todas las armas están precintadas, y los cargadores están intactos; y un cajón metálico cerrado, verde, con unas letras inscritas: DBB.

- Mierda, esto no me gusta... Las armas no han sido usadas jamás, y los cargadores están todos como venidos de fábrica.
Dice Ronald, mientras se acerca a uno de los estantes de armas.

- No lo sé lo que ocurrió aquí. Lo único que sé es que los zombis estos no se suicidaron ni se mataron enre ellos... Este sitio me da escalofríos, y el olor me está dando náuseas.
Respone Comanche, con la mano tapándose la nariz para evitar el fuerte olor a putrefacto.

- Da igual lo que pasase. Lo que importa es que ya tenemos armas, y que hay alguien más a parte de los Oscuros. Cojamos un arma cada uno, y prosigamos investigando... Dejaremos una marca en las bifurcaciones, para así saber cómo regresar, y no perdernos. Por cierto, miremos lo que hay en esa caja de metal. Quizás hay granadas o algo mejor...

Godlik3, sujeta su parte superior, y la abre rápidamente: en su interior, parece que hay algo sensible o delicado, ya que está todo recubierto de gomaespuma protectora. Godlik3, con la misma prisa, retira el material protector, y aparece ante vuestros ojos un extraño aparato. No muy grande, con una pequeña pantalla negra en su parte superior, y dos botones bajo la pantalla. Por la parte frontal luce un saliente metálico de color verde, con un orificio del diámetro de un bolígrafo.
El aparato en sí parece como una especie de ordenador personal de mano.

- ¿Qué narices será esto? Encendámoslo a ver qué aparece en el monitor. Quizás sea un radar o algo así.
Dice Godlik3, mientras pulsa uno de los botones, con las letras On/Off bajo él.

El aparato parece funcionar, pues en la pantalla aparecen las líneas típicas de un radar, de fondo negro y caracteres verdes.
La línea circular del radar se mueve del centro hacia los bordes, en un bucle infinito. En el medio, aparecen unas cifras que varían a medida que el círculo trazado por el radar aumenta y disminuye de tamaño. Van desde 1 hasta 30 metros, y así cada segundo, momento en el cual el círculo del radar empieza desde 1 de nuevo.

Todos os quedais mirando el nuevo jugetito que acabó de encontrar Godlik3.

El otro botón pone "Zoom + / Zoom -". Al pulsarlo, el círculo se transforma en un arco de círculo, seguramente mostrando lo que hay frente al que lleve el aparato. Sin embargo, el radar va desde 1 hasta 20.

Ronald, una vez que ha visto el aparato, se dirige a la pila de cadáveres para intentar descubrir más cosas, y justo en el momento que Ronald se mueve, aparece un puntito verde en la dirección de Ronald, y los números del radar, que antes se movían, se quedan ahora en el número "3,45".

- ¡Eh! ¿Habeis visto? Parece que detecta el movimiento. Ronald, acércate hacia mi.
Le dice Godlik3 a Ronald.
Y cuando éste se acerca, el puntito verde del radar, también se va acercando, cada vez que el radar hace un barrido, y los números indican a qué distancia está lo que se mueve, en este caso, Ronald.

- ¡¡Genial!!, esto nos ayudará a detectar posibles enemigos
Dice de nuevo Godlik3.

Godlik3 pulsa de nuevo el botón de zoom, y el radar regresa a su forma circular y comienza a hacer barridos circulares. Y por un muy breve momento, casi inapreciable, aparece un punto verde en el borde del radar. Los números se quedan en 29,45 metros, y ya en el siguiente barrido, el punto desaparece.

- ¿Eh? ¿Habeis visto? Un punto a 29 metros de aquí, justo enfrente nuestra... Por el pasillo... Espero que sea un "eco" producido por el anterior movimiento de Ronald.
Dice Godlik3, mirando hacia el dispositivo, y hacia Comanche (Eye del Cul), como esperando alguna respuesta o alguna solución por parte de él.

- Mmmmm... Sea lo que fuere, debemos seguir investigando este sitio. Por ahora aún no hemos encontrado nada interesante para llevar de regreso. Ahora que estamos bién armados, ya no tenemos nada que temer.

Y así, encendeis de nuevo las linternas, y salís al otro lado de la puerta...

Continuais por el complejo entramado de pasillos y bifurcaciones, pendientes todo el tiempo de la pequeña pantalla del radar, y cada cierto tiempo, iluminados por luces rojas, veis carteles que muestran la dirección a seguir para ir a:

1.- Armería.
2.- Almacenes.
3.- Laboratorio.
4.- Descenso a Nivel 2.
5.- Sala de Computación.
6.- Comunicaciones.
7.- Médico.
8.- Resíduos.

[Ronald]

bueno como estamos buscando las minas creo que debemos descender al nivel 2... ¿o son gallinas?