Cold Time - Nueva historia

Iniciado por Dwayne Hicks, Julio 16, 2006, 09:03:19 PM

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¿Que te parece mi nueva historia?

Acojonante, da miedo solo leerlo.
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Llena de suspense y miedo, muy buena.
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Esta muy bien!
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Bueno, no esta mal.
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Regular...
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Un cuento de niños.
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Votación cerrada: Julio 16, 2006, 09:03:19 PM

Dwayne Hicks

Bien, esta historia trata de un sueño que tube hace ya un par de años y que nunca he olvidado.
Raramente, es una mezcla entre varios juegos y lugares en los que he estado. La historia no esta acabada, y de momento solo publicare lo que he echo.
Todos los del foro de Arcades 3D sereis los primeros en leerla, espero que os guste y la disfruteis.

-Capitulo 1

La nave de transporte ha aterrizado hace unos momentos y ahora saldremos al exterior.
No tengo ninguna información de que hago aquí, ni de que misión tenemos que llevar a cabo.
Me he despertado sentado en el asiento de la nave. Con todas las protecciones rodeando mi cuerpo. Estaba solo.
Rato después ha entrado un comandante que nunca antes había visto, y a una soldado con una cara totalmente inexpresiva, totalmente fría. Me he armado con el rifle OICW reglamentario, el 9 mm, la escopeta de repetición y el equipo de combate de invierno.
Solo somos tres, y ahora estamos en la rampa, esperando a que se abra y salir al exterior.

La rampa se abre, y una fuerte ventisca helada recorre toda la zona de carga violentamente.
Afuera esta todo nevado. ¿Dónde estoy?
Bajamos por la rampa y delante mió solo hay nieve y niebla, apenas se ve nada.
El comandante empieza a andar, como si supiera donde tiene que ir exactamente, seguido de cerca por la mujer soldado.
No me queda otra que seguirles. Abandonamos la nave de carga y nos perdemos entre la tormenta de nieve, sin rumbo aparente. ¿Qué clase de misión es esta?

-Comandante, ¿a dónde nos dirigimos exactamente?
-No puedo decir nada hasta dentro de un rato. Ten paciencia.

No conozco de nada a este comandante, nunca antes le había visto. Y la mujer soldado, parece muy rara. Esta totalmente callada, con la cara totalmente inexpresiva. Parece un fantasma.
Seguimos andando y no hay nada. Nieve y más nieve.
No se ve nada a partir de los 30 metros, la niebla lo tapa todo.

Tic tic tic.

Mi transmisor esta sonando. ¿Quién puede estar llamándome ahora?
En la pantalla del transmisor no sale el numero de transmisor de la persona o lo que sea que me esta llamando. No son los del cuartel, ni tampoco los de la nave.
Así que no me queda otra que responder.

Tic tic tic.

Le doy al botón de respuesta...

-.............Nos estamos muriendo..........no os acerquéis................no vengáis..............el infierno espera.................Hills!-

¿Qué cojones es esto? ¿Cómo saben mi nombre? ¿Qué pasa aquí?
Parece un mensaje de advertencia. La voz era desgarrada.

-¡Comandante! ¿Lo ha oído?
-No he odio nada. Siga andando soldado.

Esto se hace mas extraño por momentos. Me despierto repentinamente dentro de una nave de transporte, me encuentro a dos que no ni quienes son, estoy en una misión que ni tan solo se de que trata...
Los nervios empiezan a aflorar.
Sacare las pastillas contra los nervios que dan en el ejército. Una droga que te despeja la mente, te mantiene activo y despierto casi durante 24h y te hace insensible a los nervios y el miedo.
Abro la capsula y engullo una de esas pastillas. Será mejor que me prepare, esto me da mala espina.
Seguimos andando. Sin rumbo. Llevamos así más de media hora.
Le volveré a preguntar al comandante.

-Una vez más, ¿dónde nos dirigimos? ¿de que trata esta misión?
-Esta bien, te lo contare. Estamos en el planeta H.A. 336, más bien conocido como Phobos. La misión es muy sencilla. Hay unas instalaciones militares por aquí cerca que el ejército cerro hace un tiempo debido al coste de mantenimiento. Simplemente tenemos que entrar, dirigirnos a los sótanos de la base y poner varias cargas de demolición para hacer volar la base.
-¿Y para esto tanto secreto?
-Si. Por el momento tenemos que acercarnos al punto A, en el interior de la base. Luego seguiremos hasta llegar al punto B y de allí al punto C, que es donde debemos colocar las cargas. No hay nada más que decir.

Por fin se algo de la misión. Pero es muy raro, nunca había oído hablar del planeta Phobos ni mucho menos de una base que la armada hubiera cerrado. Mas extraño por momentos...
Algo me hace pensar que aquí hay algún secreto encerrado.
Y sin duda lo hay.
El comandante acaba de alzar la vista.

-Estamos llegando.

De entre la niebla empiezo a divisar una colosal figura negra.
Nos vamos acercando y eso que tengo delante empieza a coger forma.
Una gran muralla verde nos rompe el paso.
Vamos siguiendo y empiezo a ver una gran entrada flanqueada por dos grandes y amenazadoras torres de vigilancia.
Entramos dentro.
Delante de mí hay una gran base militar abandonada. Inmensa.
Unas grandes antenas parabólicas salen del tejado y se pierden entre la niebla.
En el patio que queda entre las murallas y la base hay mucha chatarra hundida entre la nieve.
Barriles, amasijos de hierro, un par de naves de combate estrelladas...
Una sensación extraña me recorre el cuerpo.
Los golpes de una farola que cuelga en la fachada de la base y que el viento mueve me hacen sentir incomodo. Unos golpes secos en medio del silencio y la suave brisa.
Me detengo y me quedo observando fijamente la base.
Hay muchas ventanas con los cristales rotos, y en el interior de ellas solo hay oscuridad.
Siento como si desde esas ventanas, desde el tejado, desde dentro de la base nos estuvieran observando.

-¿Estas bien?
El comandante se me ha acercado sin que me diera cuenta.

-Siento como si nos estuvieran observando.
-Si, nos están observando.

Después de esas palabras se levanta una fuerte ráfaga de viento haciendo un ruido muy raro, como si alguien estuviera chillando.
El comandante se dirige a la entrada de la base seguido por la soldado, así que no me pienso quedar atrás.
Una puerta de acero medio atascada, da acceso a la entrada y recepción. La abrimos y delante encontramos una sala de recepción bastante deteriorada.
Entramos, y la puerta se cierra de golpe detrás de nosotros. Un fuerte ruido resuena por toda la silenciosa base.
Después queda todo en silencio.
Hay poca luz, pero puedo divisar a mi derecha un sofá de espera roto, varios carteles informativos oxidados y medio caídos.
A la derecha unos cristales de recepción, y detrás una oficina que no logro ver ya que los cristales están muy sucios y llenos de oxido.
Hay muchos papeles y documentos por el suelo, entre escombros.
Muchas de las lámparas del techo están medio caídas o rotas.
Delante hay otra puerta de acero entre abierta. Detrás esta el vestíbulo.
La abrimos y encontramos un caótico vestíbulo.
Por una parte el techo se ha derrumbado, y esta lleno de escombros.
Sillas y mesas tiradas por todas  partes. Ruinas, tuberías, cables colgando del techo, mas papeles por el suelo, y lo mas raro de todo; las paredes están todas agujereadas de lo que parecen ser disparos, y en el suelo hay casquillos de bala. Aquí paso algo.

Hay un silencio sepulcral. Y esta bastante oscuro, pero hay un poco de luz, muy poca.
Noto que desde los oscuros rincones de la base nos siguen observando. Creo que no estamos solos.
El comandante va primero, y anda despreocupadamente, como si el hecho de estar encerrado dentro de una gran y misteriosa base abandonada no le afectara.
La soldado sigue igual, con la cara inexpresiva, mirando hacia delante como si no hubiera nada.
Yo no me fió, desde que hemos entrado no suelto para nada mí recortada, atento a cualquier cosa.
Salimos del vestíbulo y entramos a una pequeña sala de comunicaciones y recepción de datos.
Las grandes pantallas informáticas están reventadas, y las CPU fritas a base de balas.
Parece que hubo un tiroteo, y las paredes siguen llenas de agujeros.
Todo lleno de escombros, por todas partes.
En una de las paredes veo algo que no me tranquiliza para nada. Sangre.
Seguimos, y entramos en unas oscuras y caóticas oficinas, también destrozadas y llenas de escombros. No hay ningún rastro humano. Todo esto da miedo, y suerte tengo de la pastilla.
Salimos de las oficinas, y nos encontramos en un largo y oscuro pasillo que parece que no acabe nunca.
El comandante entra primero.

-A la izquierda, seguidme.

A la derecha el pasillo acaba antes, y no hay nada más que dos puertas.
Torcemos a la izquierda y vamos tirando por ese oscuro pasillo que parece que no acabe nunca.
Hay varias puertas, con más oficinas y habitaciones dentro. Una de esas puertas esta abierta y al pasar veo varios ordenadores rotos apilonados y un generador.
El comandante se ha parado. A nuestra derecha tenemos un desvió. Otro pasillo totalmente oscuro del que no se ve nada gira a la derecha.
Podemos seguir adelante, o girar a la derecha.
El comandante se queda dudando un rato, y finalmente seguimos recto dejando atrás el desvió.
Me giro un momento y veo que detrás nuestro es cada vez mas oscuro. Parece que la oscuridad nos persigue.

Tic tic tic.

Mi radiotransmisor vuelve a sonar. No hay número.
Lo descuelgo...

-............delante tuyo...........vigila.............-

La misma voz desgarrada entre interferencias.
Lo descuelgo, y sin saber porque me detengo y miro el techo. Una de las placas metálicas esta medio descolgada.
El único tornillo que la sostiene se descuelga y la placa metaliza se viene abajo. Doy un salto atrás y la placa se estampa contra el suelo provocando un fuerte estruendo que resuena por toda la base.

-¿Estas bien?
El comandante se ha girado de golpe.
-Si, si, solo ha sido un susto.
Me levanto, y los ecos del estruendo siguen resonando por la base.
Una vez los ecos han parado, misteriosamente se empiezan a oír unos ruidos metálicos, como placas de acero chocando entre si. Como si hubiera unos motores en marcha en algún lugar de la base.

-¿Qué es este ruido?
Y de golpe, el ruido para secamente.
El comandante se queda con cara de incrédulo.

-Sigamos...
Finalmente llegamos al final del pasillo. Hay una verja metálica y detrás unas escaleras de emergencia, que llevan tanto a los niveles superiores como a los inferiores.
Abrimos la verja, y esta hace un chirrido horripilante.

-Hemos llegado al punto A.
En el suelo hay varios papeles y pequeños escombros. En la pared derecha hay un cartel medio oxidado donde se distingue A-1.

-Tenemos que dirigirnos al sótano, y hay que bajar todos los pisos, en marcha.

Empezamos a bajar piso por piso. Cada vez mas oscuridad.
Después de varios minutos bajando, por fin llegamos al último piso.
No hay luz. Esta completamente oscuro.
Encendemos las linternas, y nos encontramos delante de un túnel de hormigón bastante grande y con muchas tuberías en el techo.
El suelo esta lleno de agua, que nos llega hasta casi la rodilla, y empezamos a andar.
El agua esta helada. Quizás alguna tubería estallo cuando aquí paso algo...
Seguimos ruidosamente caminando entre el agua, siguiendo al comandante, una figura iluminada por el foco de mi linterna entre la impenetrable oscuridad.
A pocos metros encontramos un desnivel, hay una tubería que traviesa el túnel, y una escalera metálica que sube por encima de ella, y finalmente el pasillo continua, pero seco.

Esta vez solo se oyen nuestros pasos haciendo eco en el oscuro túnel de hormigón.
Aun no he soltado la recortada, la agarro firmemente sin separarme de ella.
Oscuridad, silencio, frió...
El túnel gira a la izquierda, parece que no acabe nunca.

-Parad!
El comandante se ha girado de golpe. A su izquierda hay una puerta.
La abre, y se queda mirando lo que puede haber dentro.

-Entraremos a descansar.
La mujer soldado entra, y cuando voy a entrar yo el comandante me cierra el paso.

-Quédate aquí, y vigila si les ves.
-¿Si veo a quienes?
El comandante me mira fijamente y entra en la habitación sin decirme nada.

Solo en medio de la oscuridad, en el silencio, sintiendo frió.
Me apoyo a la pared, e intento distraerme pensando en cualquier cosa, sin dejar de agarrar la recortada.

Craaaaaack!

A mi izquierda acaba de sonar algo! Apunto con la escopeta y me quedo en posición de ataque, esperando...

Craaaack!

Otra vez.
La luz de la linterna empieza a fallar, y no puedo ver que hay delante mió.
Se empiezan a oír varios ruidos en la pared, como si alguien la estuviera, y empiezan a oírse gritos y voces que se dirigen hacia mí.
¡¿Qué esta pasando?!
Delante de mi hay algo, y se va acercando.
La luz de la linterna se apaga de golpe, dejándome en medio de la oscuridad, y los ruidos son cada vez más fuertes.
Se oyen gritos humanos y voces aterradoras que se acercan.
Activo la visión nocturna del casco, y cuando por fin veo que tengo delante veo unas siniestras formas oscuras que parecen como personas pero deformadas que se acercan a mí.
Los golpes en la pared son más incesantes, y los gritos son aterradores.

Abro la puerta de la habitación, la cierro y....


Que os ha parecido?
Y ahora... ¿Podrias decir a que juegos o peliculas os ha recordado?

FireMaster



FRAG EM ALL!!!!!!